Desde la psicología forense es esencial divulgar las señales de reconocimiento que emergen del análisis del testimonio pedófilo y que permiten diferenciar entre pedofilia, pederastia y el movimiento MAP. Este ciclo de publicaciones responde a la necesidad de observar, identificar y prevenir toda interacción entre adultos con atracción hacia menores y niños/as, con el objetivo de proteger a la infancia mediante una intervención psicológica forense rigurosa, informada y multidisciplinar.
Discurso pedófilo y prevención psicoforense
LLa prevención desde el peritaje psicológico comienza por comprender cómo se estructura el discurso de una persona con atracción sexual hacia menores. El testimonio pedófilo, cuando es analizado en profundidad, ofrece datos relevantes para la evaluación psicológica en custodia, la detección de factores de riesgo de reincidencia y la diferenciación entre trastorno mental y convicción ideológica.
Los elementos más comunes incluyen:
- El uso de términos como «orientación sexual» para negar la naturaleza patológica del deseo.
- La justificación del contacto con menores como una relación consensuada.
- El rechazo al modelo terapéutico y al tratamiento clínico, sustituyéndolo por reivindicaciones sociopolíticas.
Desde la psicología legal y forense, es imprescindible integrar estos aspectos en los informes periciales psicológicos para valorar la imputabilidad, el daño psicológico potencial y las medidas de protección adecuadas.
Análisis del testimonio pedófilo como herramienta forense
El testimonio pedófilo tiene un fuerte impacto emocional y debe abordarse desde una perspectiva profesional, técnica y empática. En psicología criminal y psicología forense, escuchar estos relatos permite:
- Detectar indicadores de disimulación y simulación en la evaluación psicológica.
- Analizar el conflicto interparental cuando hay menores expuestos a entornos de riesgo.
- Identificar patrones de conducta que, si no se intervienen, pueden derivar en agresiones sexuales o consumo de pornografía infantil.
Este tipo de análisis resulta esencial en casos de custodia por violencia de género o valoración de idoneidad parental, donde la protección del menor y la prevención de delitos sexuales son prioritarias.
Evaluación psicológica forense en casos de atracción hacia menores
Identificar, prevenir y tratar la pedofilia requiere un abordaje biopsicosocial centrado en el análisis de la conducta criminal, los antecedentes personales y los factores ambientales. Desde la perspectiva del perito judicial psicólogo, no todos los pedófilos son infractores, pero todos los testimonios deben analizarse en términos de riesgo de reincidencia, impulso sexual, control inhibitorio y empatia.
El discurso MAP, al negar la condición clínica del trastorno, debilita las estrategias de tratamiento y prevención, favoreciendo la potencial consolidación de conductas infractoras. La evaluación del daño psicológico y la intervención temprana en los sistemas judiciales y penitenciarios permiten reducir la probabilidad de reincidencia.
El informe psicológico forense, en estos casos, debe incluir una valoración completa del perfil del sujeto, su contexto psicosocial, sus antecedentes y su cooperación terapéutica, para poder emitir recomendaciones precisas ante tribunales del jurado, juzgados de familia o fiscalías.
Protege con conocimiento experto
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